sábado, 22 de marzo de 2014

LAS AVERÍAS DE LOS A-310 ESPAÑOLES

Un Dassault Falcon 900

Un Airbus A-310


Ayer por la tarde el Airbus A-310 de la Fuerza Aérea Española designado como T-22-2 sufrió un incidente en la capital de la República Dominicana debido a un fallo en los sistemas de ayuda al aterrizaje. Se trata del cuarto percance de este calado que sufren los aviones de transporte VIP del Grupo 45 del Ejército del Aire. Los dos primeros se prudujeron en el otro A-310, cuando el PríncipeAsturias viajaba a Tegucigalpa, debido a ello, el avión estuvo parado en Santo Domingo nueve horas. Pero la mala suerte de Su Alteza no terminó ahí, porque poco después, cuando se disponía a partir en visita oficial a Brasil, otro problema detectado en el avión provocó que el aparato nunca despegara de la Base Aérea de Torrejón, en Madrid. A todo esto se suma el incidente que ha sufrido la Reina Sofía con el otro Airbus. Por si estos tres percances no fueran suficiente, el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sufrió hace dos semanas exactamente lo mismo, esta vez a bordo de un Dassault Falcon 900 mientras se encontraba en Dublín.

Todo esto ha provocado que comiencen las desconfianzas hacia la fiabilidad de estos aparatos, propiedad del Grupo 45 de Fuerzas Aéreas acantonado en Torrejón. Por otra parte, la razón de estos fallos no está demasiado clara, ya que el mantenimiento es impecable y los aviones todavía tienen bastantes horas de vuelo por delante, teniendo 31 años (2003) los A-310 y 26 años (1988) los Falcon. Pavionesllo, con elaúnn de esclarecer el por qué de todo esto el Ministro de Defensa, Pedro Morenés, en estradquiridosoración con el Jede del Estado Mayor del Ejército del Aire, ha convocado una reunión urgente en el que se debatirán las posibles causas y soluciones, e incluso, según informaciones facilitadas tiempo atrás, la posible adquisición de un tercer avión de transporte VIP que complemente a los Airbus ya existentes, aunque en ningún momento se consideraría su retirada del servicio.

Sin embargo, sí que es cierto que aunque estos aviones tienen aún pocas horas de vuelo, su antiguadad es superior a los 30 años, porque a pesar de ser adquiridos por el EdA en 2003, habían servido anteriormente con Air France desde 1983, por lo tanto, se deberá pensar en su reemplazo dentro de unos cinco años, mientras que los Falcon aún pueden aguantar otros diez más